Quiste Epidérmico

Síntomas y características

Los quistes epidérmicos se presentan como:

• Protuberancias redondas y móviles bajo la piel.
• Tamaño variable, desde pocos milímetros hasta varios centímetros.
• Superficie lisa y de crecimiento lento.
• Presencia de un punto central que puede expulsar una sustancia
• blanquecina y espesa si se presiona.
• En algunos casos, enrojecimiento, dolor e inflamación si se infectan.
  

Diagnóstico y tratamiento

El diagnóstico se basa en la observación clínica y, en casos específicos, se puede requerir una biopsia para descartar otras afecciones. En cuanto al tratamiento, las opciones incluyen:

• Observación: Si el quiste no genera molestias, puede no requerir tratamiento.
• Drenaje o punción: Para aliviar el contenido del quiste, aunque puede volver a formarse.
• Extirpación quirúrgica: Se realiza en casos recurrentes, grandes o infectados para evitar su reaparición.
• Antibióticos: Solo si hay infección secundaria.

Conclusión

Los quistes epidérmicos son afecciones cutáneas benignas que, en la mayoría de los casos, no requieren tratamiento. Sin embargo, si generan molestias, dolor o infecciones recurrentes, es recomendable acudir a un médico para evaluar la mejor opción terapéutica. Mantener una adecuada higiene y evitar manipularlos puede ayudar a prevenir complicaciones.